jueves, 8 de agosto de 2013

Tiempos Medievales en Santo Adriano.

Comenzamos la ruta cultural de hoy en el pueblo de Tuñón, al pie de la iglesia prerrománica guiados por la asociación La Ponte.

 

Fundada por el rey Alfonso III y su esposa Jimena de Navarra en el año 891 pertenece al periodo postramierense del prerrománico astur. Está dedicada a los mártires Adriano y su esposa Natalia.


Consta de planta basilical de tres naves, cubierta de techo de madera sin nave de crucero por su modesto origen, con tres ábsides cubiertos por bóbedas de cañón formando una cabezera plana.En el ábside central no falta la habitual cámara secreta, más interesante desde el exterior donde vemos una ventana de doble arco de medio punto en ladrillo con columna central y capitel decora el acceso. Como nota original, la cámara supraabsidial dispone de comunicación con el interior del templo.



Existían dos compartimentos laterales del que solo se conserva el del lado sur, suponiéndose la desaparición del "norte" en algún instante de la historia para crear el cementerio. En el interior las tres naves terminan en tres capillas del ábside flanqueadas por sus correspondientes arcos de medio punto sobre unos modestos pilares sin impostas.



La iluminación del templo se obtiene con tres ventanas a cada lado de la nave central y una ventana en cada ábside, todas con su correspondiente celosía.



La decoración interior consiste en dos capiteles del ábside central, aprovechados de la época visigoda,  que dan paso a las pinturas de influencia mozárabes más antiguas conocidas hasta el momento con su alegoría del sol y de la luna, los frisos de almenas, de flores y boleos. Destacar la cruz con astil.


 En el muro sur de la nave mayor nos encontramos una lápida encajada, nos recuerda que en el año 1108 la iglesia fué nuevamente consagrada. Justo debajo se intuye una pintura de un caballero y los cuartos traseros del caballo.Se conserva un fracmento de cancel. 



 El carácter modesto de la edificación en mampostería y sillarejo, con sillares solo en las esquinas es la nota predominante en la obra.















Sobre la portalada de acceso se ha construido una espadaña de dos vanos con sus respectivas campanas consecuencia de las reformas del siglo XVIII.


 













Abandonamos Tuñón para entrar en la senda del oso dirección a Villanueva paralelos al río Trubia.














Tras un par de km nos encontramos con una vieja Calera "comida" por la vegetación y la inutilizada fuente testigos de la desidia en el ayuntamiento.
















Nuestro paseo continua hasta el molín de Petrola, rescatados sus restos de la maleza por los socios de la asociación La Ponte.
















Ya nos acercamos a la capital del concejo de Santo Adriano por sus veigas.












Nos adentramos en la parte nueva del pueblo donde disfrutamos de su arquitectura rural.














Cruzamos para el barrio de San Romano por el puente romano que en realidad es de época medieval caracterizado por un arco de medio punto muy abierto y perfil de doble vertiente apuntalada en el centro. Se construyó en mampostería y sillarejo. Está en permanente uso y perfectamente conservado en la actualidad.



En la etapa final de nuestra ruta pasamos por el local de la asociación La Ponte nuestros guías.










Continuamos y a unos 400m vemos la iglesia de San Romano construida a finales del siglo XII  principios del XIII. Las reformas de su fachada en el siglo XVIII le dan el actual aspecto de iglesia rural barroca.















Tiene una sola nave central con el posterior añadido de la sacristía.

 











 Lo más destacado es su ábside semicircular adornado por canecillos en la parte posterior.


En el interior resaltan sus pinturas murales góticas del siglo XVII.


 










Así termina esta interesante ruta guiada que nos introduce en el medievo astur.


Forcada desde la veiga de Villanueva.



1 comentario:

  1. El arzobispado NO permite fotografiar el interior de la Iglesia prerrománica de Tuñón. Todas las fotos del interior han sido tomadas en visitas anteriores a la realización de esta ruta por la asociación La Ponte.
    Me permito recomendar al arzobispado que en vez de tanta prohibición sobre un patrimonio lo restaurasen y cuidasen como es debido para luego poder exiguir, de no tener capacidad para acometer las reformas necesarias mejor entregaba al PUEBLO nuestro PATRIMONIO...

    ResponderEliminar