domingo, 11 de agosto de 2013

Puente de Poncebos-Bulnes.

















La ruta se trata de recorrer el camino tradicional entre Poncebos  y  Bulnes por el Canal del Texo.


Una vez situados en el pueblo cabraliego de Poncebos al margen izquierdo de la carretera veremos unas escaleras que nos llevan a un puente de origen medieval : Puente de la Jaya, (220m).













Cruzado el puente sobre el río Cares dejamos a mano izquierda una cabaña y comenzamos la ascensión. Tan solo es seguir el camino que nos conducirá hasta Bulnes.


De una forma abrupta comienza la subida sobre un sendero labrado en la roca desde antiguo hasta encontrarnos con el Puente del Zardu, situándonos en el margen izquierdo del río Bulnes.

 


Unas vistas espectaculares  pues el camino permite ver el  paisaje sin ningún obstáculo en un continua vuelta y  revuelta hasta llegar a Colines de Abajo mientras vamos ganando altura, el valle se abre.



















El camino discurre entre una pendiente de árboles,hierva y rocas unido por el río con un cortado montañoso.
















A nuestra espalda vemos la impresionante panorámica del sendero ya recorrido.















Al acercarnos a Bulnes en Colines de Arriba, el camino se hace más suave hasta encontrar el Puente de Jondeyón.

 

Cruzamos el puente e iniciamos una subida por el estrecho camino que nos lleva al Barrio el Castillo, parte alta del pueblo de Bulnes.



El pueblo de Bulnes  tiene sus orígenes en un supuesto núcleo romano, conservando los restos de un torreón.

 

Sus habitantes censados rondan la treintena, dando cuenta de la dureza de la vida tradicional.

 





El Castillo aún conserva una capilla y las ruinas de una antigua rectoral entre su remodelado casco urbano.

 

Por un empinado camino bajamos a La Villa de Bulnes dejando a un lado la Fuente de la Argallada.

 





Tradicionalmente, los vecinos de Bulnes vivían de la ganadería así como de la elaboración del queso de cabrales, en la actualidad el sector turístico es una importante baza para esta población.

 

En La Villa, podemos encontrar un par de casas rurales y varios locales de restauración donde refrescarnos o comer destacando Casa Guillermina regentado por la nonagenaria propietaria.

 

Bulnes con 650m sobre el nivel del mar y 400 de desnivel en la subida nos cuenta la dureza de la vida rural donde aún continua sin tener un acceso rodado.

 

Bulnes destaca no solo por su aislamiento sino por estar en el mismo corazón de los Picos de Europa,  donde los amantes a la naturaleza hacen su parada obligatoria.

 






Por detrás de la Iglesia salimos de Bulnes pasando por delante del funicular construido en el año 2001 que permite llegar al pueblo cómodamente aunque a unos precios escandalosos.

 

El descenso lo haremos por el mismo camino de subida desde el Puente de Jondeyón hacia Poncebos.


 


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